Más que una casa, este es un lugar pensado para disfrutar, para compartir momentos y para vivir con calma. Una vivienda que se adapta tanto a la vida familiar como a quienes disfrutan recibiendo invitados, con espacios amplios, bien distribuidos y llenos de luz.
Al entrar, te recibe un salón-comedor acogedor, perfecto para las comidas en familia, las tardes tranquilas o las celebraciones improvisadas. La cocina, amplia y muy luminosa, invita a cocinar sin prisas, con ventanales que dejan pasar la luz natural durante todo el día. En esta planta principal también hay un baño completo y tres habitaciones, entre ellas una suite espaciosa con bañera de hidromasaje, ideal para desconectar después de un día largo.
La planta inferior se abre como un segundo hogar dentro de la misma casa. Un gran salón-comedor diáfano que da muchas posibilidades: zona de juegos, sala de cine, espacio para fiestas o simplemente otro rincón para estar juntos. Aquí también hay un aseo de cortesía, una dormitorio doble con su propio baño —perfecta para visitas o para quienes prefieren más independencia—, una habitación adicional y un trastero para mantener todo en orden.
En el exterior, la entrada sorprende con una piscina y vistas despejadas que invitan al relax desde el primer momento. El jardín trasero ofrece una zona tranquila con barbacoa y una pérgola perfecta para las comidas de verano. Además, la casa cuenta con rampa de acceso para coche, sumando comodidad y funcionalidad al día a día.
Es una casa pensada para quienes valoran el espacio, la comodidad y los momentos compartidos. Funcional, acogedora y con alma. Aquí, cada rincón invita a quedarse.
Su ubicación es privilegiada para los amantes de la naturaleza, senderismo, btt, etc, pues al otro lado de la calle, justo en la acera de enfrente no hay casas si no que empieza la montaña y justo el inicio de un sendero.
Lo único que se ve son árboles y lo que se oye son pájaros.
Can Feliu es una zona que combina la tranquilidad del entorno rural con la cercanía a los servicios urbanos. A tan solo 20 minutos de Barcelona, esta área ofrece un ambiente sereno, ideal para quienes buscan un estilo de vida relajado sin alejarse de la ciudad.
En esta zona se encuentra la histórica Masía Can Feliu, una construcción del siglo XIII que ha sido transformada en un restaurante de cocina tradicional catalana. Este establecimiento es conocido por sus especialidades a la brasa, como los chuletones y las calçotades, y por ser un lugar popular para celebraciones familiares y eventos especiales.
El entorno de Can Feliu es perfecto para los amantes de la naturaleza y las actividades al aire libre. Existen rutas de senderismo sencillas, como la que conecta Can Feliu con Can Xercavins, que atraviesan campos de cultivo, bosques y zonas de riera, ofreciendo vistas panorámicas de Rubí.
En cuanto a la accesibilidad, la zona está bien comunicada mediante transporte público. Las paradas de autobús más cercanas son Av. Can Tapís y Les Fonts, situadas a unos 12 y 14 minutos a pie respectivamente. Además, la estación de tren Rubí Can Vallhonrat se encuentra a aproximadamente 19 minutos a pie, facilitando el acceso a Barcelona y otras localidades cercanas.
En resumen, Can Feliu en Rubí es una zona que ofrece un equilibrio entre la vida tranquila del campo y la comodidad de estar cerca de servicios urbanos, lo que la convierte en una opción atractiva para familias y personas que valoran la calidad de vida.